- Vaya con la nochevieja.. Eso me dije a mi misma cuando abrí la puerta del baño y estaban todos allí mirándome y riéndose de nosotros. Estaba muy claro lo que habíamos hecho en el cuarto del baño..
- No sabía donde meterme, menos mal que uno de mis amigos se apiadó de mi y dijo lo de hacer un karaoke con el juego ese de la play. Todos aceptaron encantados y le guiñé un ojo en señal de complicidad
. Me encontraba tan mal que me iba a ir en ese mismo instante a cualquier lugar que no fuera aquel para escapar de las miradas acusadoras de toda la casa. Parecía que te estaban diciendo.. "Transexual maricón" "Enfermo de sexo".. y mil cosas más..
- Finalmente, cuando cogía el abrigo para irme mi nuevo amor me dijo;
- "Espera que bajo contigo" y nadie osó discutirle nada ni mirarle mal aunque fui muy consciente de las risitas, codazos y rumores. Pero me daba igual pues estaba agusto y muy orgullosa de haber empezado este 2015 con algo de sexo mientras todos los demás me miraban con cara de envidia. ¡Qué se jodan!
- Mi amiga Sonia, cuando nos vio juntos salió corriendo y me preguntó que sí estaba todo bien y sí necesitaba algo. Le agradecí, sinceramente, el gesto pero no me apetecía nada hablar de ello. Mi buena amiga lo entendió y me dijo que no había problema que volviera cuando quisiera a la casa, a dormir o a lo que fuera. De hecho me dio un juego de llaves y me dijo que por ahora no las necesitaba. La dí un abrazo y por el rabillo de ojo vi a Johnny que me estaba saludando y lanzándome un besito lo cual agradecí y le respondí de igual manera.
- Una vez en la calle, donde se oían claramente los gritos de la gente ebria de felicidad y de otras cosas, nos quedamos los dos mirando sin saber que decirnos hasta que le pedí a Moha que caminaramos un poco para despejarme. Ni contestó tan sólo asintió con la cabeza.
- Cuando llevábamos un rato caminando me dio las gracias por la mamada que le acababa de hacer el baño y me dijo que le había interpretado mal que lo de follar me lo decía para que yo también disfrutara. No se porqué pero me pareció sincero. Se lo agradecí con un beso en la boca y le dije que nos fuéramos a otro sitio a tomar algo.
- Parecía que lo estaba deseando y me preguntó que sí podíamos ir a casa de un amigo rockero suyo que vivía cerca de allí y que organizaba una fiesta. Le recordé que a mí no me importaba pero que a lo mejor a él sí le importaba mi condición de crossdresser. Me sonrió y con un tierno abrazo me aseguró de que no me preocupara.
- Tardamos más de media hora en llegar al lugar que estaba muy cerca de la casa de Sonia, aunque hicimos una parada en un portal abandonado donde dimos rienda suelta a nuestra lujuria. Nos besamos, me desnudó (menos la ropa interior que le pedí que no me quitara...), se desnudó y casi me corro al verle. Con ese cuerpazo, esa mirada y esa pedazo de polla dura y gigántesca desafiando a la ley de la gravedad...
- El resto os lo podéis imaginar, casi le dejo seco y, por fin, terminó dentro de mí dándome un placer como hacía tiempo que no me daban...
continuará
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